Mediaset, una de las cadenas más importantes en el ámbito nacional, ha hecho realidad el deseo de sus espectadores. Secret Story es el nuevo reality con desconocidos por el que Telecinco ha apostado todas sus cartas. Pero, todo apunta a que su retransmisión no es una de las más importantes en el prime time televisivo.
Secret Story se creó en base a la necesidad de la audiencia de recuperar el formato Gran Hermano. En un principio, sin éxito, intentaron salvar esta petición con La casa fuerte. Los espectadores, no conformes con la decisión, pidieron a Mediaset una mejor opción, volver a adentrar en la casa de Guadalix a personajes anónimos. La cadena no dudó en oír la voz del pueblo, y Secret Story se ha convertido en la opción más parecida que recordamos del antiguo formato.
¿Realmente ha triunfado Telecinco con su nueva apuesta? Las cifras apuntan a que no. El reality no solo no ha llegado a las cifras idóneas, sino que, ha supuesto un cambio continuo en su parrilla. Han sido tantas las variaciones que incluso, hemos perdido la cuenta. La estrategia más usada por la cadena ha sido la de combinar la transmisión de Secret Story entre Cuatro y Telecinco. Posteriormente, la gala, uno de los momentos más vistos, se ha trasladado en varias ocasiones de día, primero el miércoles, luego, al jueves, y viceversa. Hasta que, con la incorporación de Pasión de Gavilanes 2, la decisión ha sido unánime, el reality pasa su entrega más importante al jueves, para dejar todo el protagonismo a la novela.
Desde el cese definitivo de Gran Hermano, la única variante válida para Telecinco ha sido La isla de las tentaciones. Ni MYHYV -que fue eliminado de su programación-, ni La Casa Fuerte han podido recuperar lo que tanto ha emocionado al público durante tantos años, GH. De hecho, amoldar la parrilla en tantas ocasiones es una muestra de la desesperación que tiene la cadena por resurgir sus famosos realities. Cuando un programa no funciona, le es fácil a un medio cambiar su retransmisión tantas veces. Además, lo que hace convertir a un espectador en un fiel seguidor, es la costumbre, y Secret Story no cumple con ese requisito.
Aún no hemos entrado en la recta final del programa, por lo que quizás este nuevo cambio -a no ser que se vuelva a variar-, puede ser el toque que faltaba. De momento, los jueves por la noche tienen un nombre, y ese es Secret Story.
