Cuida tu pelo teñido con estos sencillos tips

“Te vas a quedar calva de tanto teñirte”. Cuántas veces habremos escuchado esa frase. Pero la realidad es que es muy complicado que eso pase. Hoy vamos a hablar de trucos para cuidar tu pelo teñido, porque llevar el pelo con coloración no significa que tenga que estar dañado y apagado.

Lo primero, para que te quede un color uniforme sobre el cabello es esperar a que no esté recién lavado. Si además lo haces en seco conseguirás mejor fijación y un color más intenso y sin parches.

Lo que sí es verdad es que al teñirte el pelo lo expones a químicos y eso hace que se dañe con más facilidad. La hidratación es muy importante para que tu melena luzca sana y brillante. Pero ¿cómo puedes hidratar tu pelo? Pues muy sencillo, si está húmedo a través de acondicionador y mascarilla. Pero también lo puedes hacer en seco, utilizando aceites y serum. Uno de los más usados es el aceite de coco porque es barato, fácil de conseguir y además da muy buenos resultados.

Tienes que procurar no utilizar distintos tintes en cortos periodos de tiempo, ya que tienen elementos abrasivos como el amoniaco que hacen que el pelo pierda fuerza. Por eso, debes intentar aguantar lo máximo posible sin hacerlo.

Por otra parte, si eres de las que usa planchas y tenacillas con frecuencia, deberías usar un protector térmico para no perder el color. El cabello con el calor se daña y se vuelve poroso, por ello si vas a tomar el sol durante un periodo prolongado de tiempo también se puede aplicar. Además, debes evitar lavarte el pelo con agua muy caliente para que los pigmentos de color tampoco se desprendan, aunque en invierno sabemos que es difícil.

En la ducha, usa siempre productos específicos para cabello teñido. Estas gamas de productos tienen filtros protectores contra la radiación solar que decolora y modifica el color. Otra alternativa que funciona muy bien con los cabellos estropeados son los champús naturales.

Por útimo, evita el llamado “efecto casco”, tinte más intenso en la raíz que en las puntas, saneando regularmente las partes más maltratadas.