Mucha gente empieza muy motivada la famosa operación bikini, pero luego se desanima y desiste. Otra deja pasarlo y alarga tanto la espera que comienza un mes antes. Y, sin embargo, hay otra que no es fan de la operación. Este último grupo tiene dos vertientes; aquellos que les da igual de verdad, y los demás que piensan que es una pérdida de tiempo y luego están todo el verano arrepintiéndose de no haber hecho nada. He de decir que muchos años yo me encuentro en este último colectivo. ¡Pero es hora de ponernos las pilas!
No se trata de matarse diariamente dos horas en el gimnasio, sino de saber organizarse y seguir una constante para no perder el ritmo. Poquito a poco es cómo se consiguen unos mejores resultados y no a trompicones. Y no estoy hoy aquí para daros una charla motivadora, sino para ayudaros con música a lograr esos objetivos. Ninguna sorpresa, porque como siempre digo, la música es el mejor acompañamiento para hacer cualquier cosa.
Es evidente que con la música clásica es casi imposible trabajar y entrenar. Pero en este mundo hay de todo. Sabemos qué es lo que te pones para ir al gimnasio y por eso aquí van unas cuantas playlist para que puedas elegir y hacerlo mucho más llevadero.
Existen las personas que necesitan mucho ruido y muy marcado. Con mucho ritmo y similar en todas las estrofas para estructurarse los ejercicios. Para ellos tenemos playlist de electrónica, ya que la mayoría se rigen por el mismo sistema. Además, hay millones de remixes de temazos que a todos les encantan. En Electrónica Máxima mis canciones favoritas son Last Time o Better When You’re Gone.
Para los que odian los ruidos de la electrónica, y prefieren algo más cercano tenemos la playlist de Latin Cardio. Esos momentos de bicicleta elíptica y cinta se pasan mucho más rápido con Daddy Yankee o J Balvin de fondo. Incluso activan tus motores para salir de fiesta.
Por último, nos centramos en los amantes del rock, con los que una hora en el gimnasio pasan como diez minutos en un festival. Nos traslada, por supuesto, a los 90 la mayoría de las canciones como Livin’ On A Prayer o Billie Jeans. Salvo alguna excepción la mayoría de los usuarios de esta playlist, Born To Run 150 BPM, para el gimnasio son de la generación anterior a los millenials.
Prueba todas y elige la que más se adapte a tu estilo, ¡pero siempre y, sobre todo, disfruta con la música!
