EL CAMBIO DE COLOR DE PELO, ¿LA CLAVE DEL ÉXITO DE BALMAIN EN PARÍS?

Durante el pasado jueves, la firma de lujo Balmain -dirigida por Olivier Rousteing- dejaba fascinada a la ciudad parisina con el cambio introducido en su nueva colección; y no, no está vinculado a los diseños, sino a las melenas de sus modelos. Rubias morenas, y morenas rubias. Tintes, pelucas y extensiones se dieron cita convirtiéndose en las grandes triunfadoras de la noche. El por qué, te lo contamos ahora. Aunque si hay algo que hemos comprendido, es que el show de Balmain ya no es un simple desfile, sino algo más; un evento que se acerca peligrosamente al concepto espectáculo, desplazando la importancia que hasta ahora tenían los tejidos.

Aun así, Rousteing ha encontrado una fórmula -secreta en ocasiones- para evitar una catástrofe. De este modo, a su pasarela solo se suben las mejores modelos del mundo. En este sentido, hemos vuelto a ver a las mediáticas Gigi, Kendall, Alessandra Ambrosio o Rossie…todas ellas envueltas en imposibles e infinitos diseños, con una pronunciada sensualidad. Aun así, que las modelos más influyentes del planeta formen parte de su show no es suficiente, pues se necesita algo más; algo que cree expectación y sorprenda. Así, el genio que habita en Olivier sale a la luz modificando una de las partes más valiosas y cuidadas de sus modelos: el pelo.

La top morena, Kendall Jenner -quien abrió y cerró el desfile- lució una media melena rubio platino que dejó boquiabiertos a los invitados, al igual que sucedió cuando la eterna rubia de moda  -Gigi Hadid- se transformó por unas horas en morena. Al cambio también se sumaron dos nuevas morenas -gracias a pelucas por supuesto- como Rossie Huntington y Lily Donaldson, mientras que Karlie Kloss y Ambrosio fascinaron a los espectadores y seguidores de la firma, con una lisa y brillante postiza melena rubia. Un cambio de papeles que tuvo un efecto de lo más acertado, pues el director creativo de la casa de lujo francesa consiguió que todos hablasen de Balmain, incluso antes de que el desfile llegase a su fin. Esta estrategia, además, ha conseguido remover los fondos financieros de la firma, justo cuando vive uno de sus momentos más agitados.