Ana Obregón ha vuelto a ser el centro de atención tras su reciente aparición en el programa ‘Y ahora Sonsoles’, donde abordó la polémica generada por la portada de la revista ¡HOLA!. En ella, la actriz celebraba su cumpleaños junto al de su nieta, Ana Sandra, lo que ha suscitado un aluvión de críticas sobre la exposición mediática de la menor.
Durante su intervención, Obregón se mostró tajante ante los comentarios en su contra. “Cada cosa que hago es un revuelo”, expresó con resignación, defendiendo su decisión de mostrar públicamente a su nieta. Aseguró que esta era la última voluntad de su hijo, Aless Lequio, fallecido en 2020, y lamentó la falta de empatía que siente por parte de algunos sectores de la opinión pública. “No hago daño a nadie”, insistió.
La actriz y presentadora reafirmó su postura de que tiene pleno derecho a decidir sobre su vida y sobre la crianza de Ana Sandra. “Es mi nieta y es la hija de mi hijo”, afirmó con contundencia, aunque reconoció que los comentarios negativos le afectan. “Duelen, aunque pocas cosas pueden hacerme daño ya”, confesó.
Obregón también se sinceró sobre la situación familiar de la niña. “Esta niña no tiene padre ni madre, tiene una abuela”, reflexionó, explicando que es plenamente consciente de la responsabilidad que ha asumido. Su mayor deseo es asegurar un buen futuro para su nieta y proporcionarle todo el amor posible. “No puede tener más amor”, aseguró.
En relación con la sobreexposición de la menor, Obregón adelantó que ha tomado una decisión importante: “A partir del año que viene, mi hija no aparecerá en ningún lado”. Explicó que cuando su hijo Aless era menor impulsó una campaña para proteger a los niños de la prensa, diferenciándolo de compartir imágenes de la pequeña en un ambiente familiar y festivo.
Uno de los momentos más emotivos de la entrevista llegó cuando habló sobre las preguntas que la niña comienza a hacer. “El otro día ya me preguntó ‘¿y papá?’”, reveló conmovida. Recordó la historia de su propia madre, quien fue criada por su abuela tras la muerte de su madre biológica. Con esperanza, expresó su deseo de que su nieta crezca con un sentimiento similar de gratitud y amor por la familia que la ha criado.
Uno de los temas más comentados en los últimos días ha sido la declaración de Alessandro Lequio respecto a la herencia de Ana Sandra. El colaborador televisivo afirmó que la niña no tendrá derechos sobre su patrimonio, ya que legalmente no es su nieta. Obregón respondió aclarando que, desde el punto de vista biológico, Ana Sandra sí es hija de Aless, aunque legalmente no tenga derechos sobre la herencia de Lequio.
“Cuando escuché esas declaraciones, hablé con él”, afirmó sin entrar en más detalles sobre la conversación. Sin embargo, sí destacó que Lequio se preocupa por la pequeña, aunque evitó confirmar si ya la ha conocido en persona.
Con esta intervención, Ana Obregón busca zanjar la polémica en torno a la exposición mediática de su nieta y reafirmar su papel como su principal referente familiar. Mientras tanto, la controversia sobre la legalidad y la ética en torno a su maternidad subrogada continúa generando debate en la sociedad española.
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