Seamos sinceras, si fuésemos estrellas en potencia y quisiésemos entrar en la industria musical nos apuntaríamos sin dudarlo a un talent show. ¿Por qué? Bueno, a menos que tengas un familiar, padrino o conocido ya en el mundillo o cientos de miles de seguidores en RRSS tras la viralización de uno de tus temas, es la única forma de llegar al gran target de tu país.
Si el programa tiene éxito, y estos “realities” lo suelen tener, es muy probable que llames la atención de la audiencia y que por contrato tengas productores musicales que publiquen tu disco y te lleven de gira con el resto de concursantes. Pero, ¿y después? Ahí llega la parte no tan bonita de este cuento de hadas musical, y es que muchas veces la historia termina allí. Te quedas como el merch de esa edición del programa, un show que ya está en busca de la siguiente hornada de estrellas, que se estrellarán antes de empezar.
Los talent shows son un trampolín que al que no todos tienen acceso, pero que hay que saber utilizarlo para mantenerte arriba después del salto. Porque sí, hoy en día son muchos los artistas reconocidos que saltaron a la fama en diferentes concursos de talentos. Por ganarlos y también, por perderlos. No obstante todos ellos tienen una cosa en común, han sabido reorientar su carrera más allá de ser un producto comercial del talent show.
Hoy repasamos cinco grandes historias nacionales e internacionales que nos inspiran a ver en estos concursos, los nacimientos de verdaderos artistas. Demostrando que es posible crecer en la música gracias a la televisión.
Cinco artistas que triunfan después de los talent shows y no de la manera que uno esperaría. Porque, ni ganar un talent show es garantía de éxito ni perderlo que tu carrera musical no tenga futuro
Su historia de éxito es historia viva de la industria musical actual. Fue rechazado como solista en Factor X UK, y al unirse a One Direction, el grupo ideado por Simon Cowell recordando a las boy band de los 90, el éxito del joven y el resto de los integrantes (Liam, Zayn, Niall y Louis) fue estratosférico.
La década del 2010s está marcada por sus discos, giras y legiones de directioners que les dieron fama y fortuna, pero también ese sentimiento de ser artistas algo artificiales y prefabricados. Por ello, no ha sido hasta estos años cuando hemos visto el verdadero potencial de Harry Styles como artista. Con voz propia y sobre todo, libertad.
Hay veces que los objetivos se cumplen, pero fuera del programa. Este es el caso de Nicole Scherzinger, quien participó en 2001 en la primera edición del talent show Popstar. ¿La misión del programa? Crear una girl band de éxito ni más ni menos. Y al terminar la temporada, lo hicieron (más o menos). Este se llamó Eden’s Crush. No obstante, no duraron mucho.
Quienes sí duraron y cambiaron la imagen de las girl bands fueron las Pussycat Dolls de quien Nicole Scherzinger era – y es tras su vuelta hace muy poco – la líder y con las que saltó a la fama internacional con canciones que son iconos de los 2000s.
En España tenemos nuestra propia historia de artista luchadora e incansable. Y es que Miriam es el vivo ejemplo de que los talent shows pueden equivocarse, pero cuyo trampolín, aun así, es posible utilizar. Tras trabajar como bailarina para artistas como Miguel Bosé, Chris Brown o Enrique Iglesias en 2010 participa en el talent Fama Revolution, en el que pronto fue expulsada.
En 2017 vuelve a intentarlo en el mundo televisivo en Operación Triunfo pero pronto ese sueño se rompe, al convertirse en la primera expulsada y estar tan sólo una semana en la casa. No obstante, Mimi renació de sus cenizas como Lola Índigo y no tardó en triunfar y salir en ese mismo programa que no supo valorarla, pero en esa ocasión como artista invitada.
Quedarse a las puertas de la victoria de un talent show no es el fin de una carrera musical. Más bien, puede ser el comienzo de algo mucho mayor que el llevar simplemente el título de ganador.
El quedar segundo en la primera edición de Operación Triunfo en 2001 le abrió las puertas al mundo a David Bisbal. Convirtiéndose en una de las estrellas latinas más importantes del panorama actual. Colaborando incluso con artistas internacionales como Rihanna y Miley Cyrus antes siquiera de que la música en español tuviese la popularidad que tiene ahora.
De la medalla de plata, al “bronce”. Adam Lambert quedó tercero en la octava temporada de American Idol. Pese a su potente y característica voz no consiguió convencer a los jueces (o como sospechan muchos fans estos no quisieron otorgárselo por su orientación sexual). Pese a las controversias él siguió trabajando en su música, y tras la gira del programa, Adam Lambert consiguió la posición #1 de Billboard 200 con su segundo álbum Trespassing. Todo un éxito para su carrera como artista, y también para el colectivo, ya que fue el primer solista abiertamente gay en conseguir tal hazaña.
Desde 2012 sigue cumpliendo sueños, siendo el vocalistas colaborador de uno de los grupos más importantes de la historia de la música. Junto a Brian May y Roger Taylor sigue llevando la magia de Queens por el mundo entero.
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